Glenn Doman falleció el 18 de mayo de 2013.
Más de 90 años tenía nuestro Doman. Una vida dedicada a los niños, al aprendizaje, a la inteligencia; ésa misma que él mostraba cada vez que hablaba.
“Quien quiere entender, entiende a la primera; los otros ni aunque se lo explicaras mil veces lo entenderían”. No, no se refería a los niños, sino a los adultos a los que él intentaba explicar que cada niño es un genio y que no podemos desgenializarlos nosotros, los mayores.
“La magia está en los niños”, era otra de sus frases preferidas. Los niños quieren aprenderlo todo y lo quieren ¡ya! Por eso les brillan los ojos. Y a Glenn también le brillaban los ojos, le brillaban como a un niño ávido de saber, de aprender, de querer estar siempre en contacto con todo el mundo.